31 julio 2015

Tres cosas que no puedo entender


1. No entiendo como creen que la presidenta va a repuntar su popularidad desnterrando casos de derechos humanos durante los militares. Es es una idea muy loca y solo sirve para predicar a los conversos. Resulta que han pasado más de cuarenta años tratando de que los chilenos repudiemos a los militares y admiremos a Allende: fracaso total, mientras más pasa el tiempo más crece el aprecio a los militares y Carabineros, que llevan cerca de nueve años seguidos elegidosen las encuestas  como las instituciones más confiables del país. ¿Como piensan que por campañas odiosas van a conseguir adeptos? Deben estar medio locos. Lo que no consiguieron en cuarenta años no lo van a lograr en una campaña comunicacional, por más millones que gasten.

2. Como las víctimas de abusos y crímenes durante los militares se vendieron tan rápido. Hay unos pocos que permanecieron dignos viviendo de su trabajo, pero el número enorme de los sinverguenzas que amplificaron e inventaron historias para beneficiarse hicieron que hoy nadie les crea. Antes estos mismo tipos decían con cierto orgullo ser exonerados políticos, hoy lo ocultan porque exonerado es sinónimo de ladrón, que vive sin trabajar probablemente en base a una mentira. Las "víctimas" resultaron mentirosas y descaradas, por algo esa bandera dejó de ser electoralmente rentable -si es que alguna vez lo fue- hace muchos años.

3. Como llegó el Servicio de Impuestos Internos y la Fiscalía al actal estado de sicariato político. Resuta que por un mismo delito unos son evidentemente culpables antes del juicio y otros son inocentes a los que ni siquiera se les puede presumir nada. El Servicio de Impuestos Internos demoró un par de días en poner una denuncia contra un tipo de oposición, mientras que llevan meses ignorando algo que todo el mundo conoce: que gente del gobierno -hasta los más altos rangos- ha actuado igual o peor y no les pasa absolutamente nada. Es inexplicable. Bueno, es explicable pero vergonzante, simplemente están estirando el chicle lo más que puedan con la esperanza que no se va a romper, ese ha sido el error histórico de la izquierda chilena.

La izquierda siempre ha fracasado en Chile, y aunque construyeron un cuento fantástico donde luchaban contra gigantes -los poderosos de siempre- la verdad es que han fracasado porque no sirven, no tienen la calidad intelectual, moral ni técnica para dirigir. Los únicos que no hacen un papelón son los testimoniales, que sin hacer nada útil, viven ventilando su indignación desde puestos bien pagados. Son el paradigma del parasitismo. En rigor ni siquiera es un asunto de la izquierda, sino algo que viene de mucho antes, es lo que Encina llamaba "la pandilla", tipos chiflados, revoltosos, de pocas luces y violentos. Siempre que llegan a mandar terminan suicidándose o arrancados.

Claro que tienen la ventaja táctica que les da ser violentos y ambiciosos, el motor de la envidia los mueve y eso los hace buenos para alcanzar el poder, Pero cuando llegan a mandar siempre fracasan, porque usan la táctica de pasar a la punta y estirar el resorte lo más que puedan, no les importa que cuanto más se estira más violenta será su vuelta al estado normal, son incapaces de ver eso. Así funcionaba Allende cuando empezó a tolerar las tomas y a poner interventores, quería ver hasta donde podía y lo mismo están haciendo hoy los sicarios del Servicio de Impuestos Internos y de la Fiscalía.

Al final todo esto es muy bueno. Mientras más ataquen a los militares, más antipatía cosechan. Para que hablar de los que atacan a Carabineros que -a un costo creciente de muertos y heridos- van acumulando cada vez más simpatía de la gente normal. Han estado más de veinte años colocando a su gente: todos esos inútiles bien forrados en los servicios públicos, fiscalía, poder judicial y -para que hablar- en el congreso. Tal como los interventores acumulaban antipatía durante la Unidad Popular día  a día se van haciendo más  impopulares.

Si hay balgo que hacen bien es desprestigiarse, para eso son campeones.

30 julio 2015

Feliz cumpleaños Perú


Siempre mando saludos de cumpleaños atrasados. ayer 28 el Perú celebró su aniversario 197, razón por la cual le mando mis felicitaciones a los muchos amigos que tengo por esos lados, especialmente de Tacna que como saben, ya es como mi segunda casa.

Para alguien que vivió en Arica a fines de los setentas, cuando estuvimos a punto de ir a la guerra, no deja de asombrar el nivel de integración en que vivimos ahora. Yo empecé a ir a Tacna durante el primer gobierno de Alan García, a principio de los ochentas, cuando había una gran crisis económica en Perú que activó mucho el comercio entre las dos ciudades. Una vez que me entrevistaron para "El Comercio" dije en broma que Arica y Tacna deberían levantar una estatua a Alan García. Creo que en ese tiempo empezaron los viajes masivos y varias veces al día entre ambas ciudades. Era la época dorada del contrabando cuando se hicieron muchas fortunas en ambos lados de la línea.

Fujimori abrió la economía en Perú, lo que significó una revolución económica, que profundizó Toledo y el segundo gobierno de Alan, cuando dijo abiertamente que en lugar de competir en ejércitos Perú se debía dedicar a superar económicamente a Chile, gran idea.

La enorme inmigración de peruanos que recibimos a partir de los años noventa fue otra razón del mejoramiento de las relaciones. Al principio los inmigrantes eran mirados muy en menos y considerados una peste en Santiago, pero se fueron gannado su lugar y hoy son una de las colonias más integradas y mejor establecidas en Chile. Quien lo diría, procesiones del Señor de los Milagros, restaurtantes peruanos por todas partes, en Santiago hace rato que lo peruano no es raro.

El comercio y el trabajo une a los países mucho más que miles de diplomáticos, y no cuesta nada. Por lo mismo vuelvo a reflotar la idea del

Libre tránsito entre Arica y Tacna
Eso, que se pueda pasar libremente entre ambas ciudades sin presentar ni un solo documento, y que los controles fronterizos se desplacen a Cuya en Chile y Tomasiri en Perú, que si son fronteras naturales, muchísimo más fáciles de controlar. He estado conversando la idea con amigos y Gabriel Abusleme -que sabe harto de estas cosas-  está de acuerdo, siempre que se mantenga la inspección de sanidad vegetal y drogas en Chacalluta o Santa Rosa.

No es mala idea, podría ser un solo control integrado, una sola inspección en lugar de las cuatro que se hacen hoy  (dos en cada pàís) ¿por que diablos inspeccionar cuatro veces? basta con que alguien de aduanas revise una sola vez en el país que está ingresando. Aduanas chilenas al entrar por Chacalluta y aduana peruana al ingresar al Perú por Santa Rosa: punto.

Por supuesto que para el resto de las mercaderías debería existir el más completo libre tráfico, es ridículo ver a aduanas o policía de investigaciones incautando ropa o mercadería que infringen propiedad intelectual, está bien si reprimen la venta pero es ridículo que repriman el uso ¡nadie hace caso de esas restricciones!

Libre tránsito de personas y bienes entre Arica y Tacna, fin a la absurda e inútil frontera y a los interminables trámites en Chacalluta y Santa Rosa. Con mucho menos personal y a costo más bajo se puede controlar mejor en las fronteras naturales de Cuya y Tomasiri.

Que los países mantengan intacta su soberanía, jurisdicción y todo lo demás en los respectivos territorios. Esto no es algo nuevo ni raro, existe en muchísimos lugares del mundo ¿por que no en la frontera con Perú?¿Por que en lugar de tener frontera tipo coreana no tenemos una como la Triple Frontera en Foz de Iguazu?. Correr los controles fronterizos significaría un ahorro enorme en logística, recursos humanos, policías, funcionarios, porque en lugar de controlar a decenas de miles de personas que se desplazan cada día entre Arica-Tacna-Arica el control no sería más de unos cientos de personas que pasan al sur. Fácil, económico, más seguro.

En fin, feliz cumpleaños Perú, aunque atrasado,un abrazo a los vecinos de parte del enemigo hereditario y ojalá que algún día se implemente el libre tránsito entre Arica y Tacna.


29 julio 2015

Historias y racionalizaciones

Hace tiempo que estaba por comentar Pensar Rápido, Pensar Despacio, el libro de moda. Lo escribió David Kahneman, psicólogo ganador del Premio Nobel de Economía en el año 2002. Kahneman fue el mentor de Dan Ariely, de quien hemos conversado mucho acá mismo y ambos se dedican a la behavioral economics, la economía del comportamiento que es un asunto muy divertido que estudia la conducta de los consumidores y cosas por el estilo.

Experiencia y memoria
Una de las cosas interesantes de Kahneman es la distinción que hace entre experiencia y memoria. Experiencia son las cosas que pensamos y sentimos cada momento, en este momento yo tengo la experiencia de escribir la entrada 3.533 de este Templo del Ocio y voy pensando distintas cosas de las que ni me acordaría en un rato más si no las dejara por escrito. La experiencia es lo que olvidamos en un 90%.

Por ejemplo nadie se acuerda lo que experimentó la semana pasada a esta misma hora, no hay modo porque gran parte de nuestras experiencias duran en promedio unos 3 segundos, tenemos miles de millones en nuestra vida y las olvidamos masivamente.. ¿Que recordamos entonces? Lo que recordamos son historias que construimos en base a algunas experiencias que nunca se nos olvidan. Es simbiotico: hacemos historias con nuestras experiencias y esas experiencias las recordamos solo gracias a las historias. Los recuerdos no son experiencias, sino historias, cuentos.

La importancia de las historias
Seguramente todos pensamos a veces eso de "todo tiempo pasado fue mejor" y es porque el pasado es un cuento que construimos en parte con experiencias y en parte con imaginación, los recuerdos pueden ser embellecidos o, por el contrario,vistos como una cosa horrible, pero tienen gran parte de imaginación.

¿Que nos hace felices?
Las historias que construimos sobre el pasado y sobre el futuro nos hacen felices o infelices, optimistas o pesimistas. Muchos gurus recomiendan vivir "aquí y ahora", "disfrutar el presente" y todo ese blabla, pero es imposible porque el presente se nos escapa, a lo más podemos vivir de historias recientes, pero el presente no existe como un lugar donde se pueda permanecer.

Pensamiento rápido
El pensamiento rápido es la intuición, lo que hacemos casi automáticamente pensando muy poco. Hay gente que cree tener el "don de la intuición" como si fuera un don escaso y muy valioso, pero no es así. Todos somos -en enorme medida- intuitivos, mucho más intuitivos que racionales y la mayor parte de nuestra conducta y decisiones son tomadas por impulso, porque nos tinca.

Si no fuésemos intuitivos no podríamos manejar un auto, cruzar una calle, ni hacer las cosas más sencillas que hacemos en modo "piloto automático". Cada día tomamos miles de decisiones, una tras otra y la mayoría de esas decisiones no necesitamos pensarlas.

Pensamiento lento
Ayer me comentaba un amigo que vive en un departamento frente al mar, que a veces le preocupaba la posibilidad de un tsunami, porque está en un segundo piso y la ola podría alcanzarlo, pero pensando en las probabilidades, tal vez era más probable un incendio que un tsunami, y en caso de incendio vivir en segundo piso es una ventaja para arrancar. Me llamó la atención porque normalmente no hacemos esos cálculos para tomar decisiones al comprar un departamento, o tal vez los hacemos pero de manera inconsciente.

Cada vez que tomamos una decisión lo hacemos bien por impulso o bien por razonamiento, la enorme mayoría de las decisiones las tomamos por impulso, las menos por razonamiento. Pero hay una tercera forma que es por racionalización, esta debe ser la más común.

Racionalizando
Supongamos que estoy escogiendo un auto para comprar y veo uno que me gusta estéticamente, la forma, el color y cosas así. Entonces lo que hago es racionalizar: construyo una cadena de justificaciones para "vestir" de lógica mi preferencia intuitiva. Para eso sirve el sesgo, que nos permite exagerar lo bueno y disminuir o ignorar lo malo. Haciendo un análisis sesgado entonces puedo construir una excelente justificación para mostrar al mundo que el auto cupé color plata es la mejor opción que existe.

Las racionalizaciones son la base de nuestros principios morales, de nuestras opiniones políticas, de cada cosa que admiramos u odiamos. Creemos que son cosas lógicas, obvias e irrebatibles y que los demás que no comparten nuestras preferencias son tontos o malos. Sin embargo la moral, la política y todo eso son solo justificaciones de nuestras preferencias impulsivas, nada más, nada menos.

28 julio 2015

Turismo boliviano en Arica, en cifras



Todo lo que el fisco fomenta fracasa y viceversa
Como escribi en una entrada hace poco, el turismo boliviano normalmente se menosprecia entre las autoridades nacionales, porque afirman que su aporte en divisas es bajo. Sin embargo Arica tiene la particularidad que es destino turístico final de un solo país en el mundo: Bolivia, a nuestra ciudad llega el 73% del turismo boliviano que ingresa a Chile y este tiene un impacto de primera importancia en la economía regional, pese a que las políticas de gobierno hacen poco y nada por fomentarlo.Se cumple la regla que dice que todo lo que fomenta el fisco es un fracaso y lo que el fisco desatiende es exitoso.

Veamos las cifras
Estudiando de las cifras de turismo receptivo de visitantes bolivianos a Chile entre los años 2003 y 2013 se obtienen los siguientes resultados

Año
Tot Extranjeros
Tot Bolivia
%
Ranking
Ingresos estimados
2003
1.613.523
161.352
10
20.636.959
2004
1.785.024
178.502
9,6
22.830.457
2005
2.027.082
202.708
9
25.926.379
2006
2.252.925
225.293
12,2
28.814.911
2007
2.506.756
250.676
13,2
32.061.409
2008
2.698.659
269.866
13,8
34.515.849
2009
2.749.913
274.991
13,1
35.171.387
2010
2.766.007
276.601
12,7
35.377.230
2011
3.069.792
306.979
12,1
39.262.640
2012
3.554.279
355.428
10,3
45.459.228
2013
3.576.204
357.620
12,6
45.739.649

Según la la Encuesta de Gasto de Turismo Receptor y Emisor - 2014, elaborada por el Sistema de Información Estadísticas de Turismo (SIET), 4 de cada 10 bolivianos escogen a Chile como destino turístico.

¿Y que dice Sernatur?
Por su parte el Comportamiento y Perfil del Turismo Receptivo 2012, elaborado por el Servicio Nacional de Turismo de Chile dice que “Las llegadas de turistas residentes en Bolivia alcanzaron los 355,0 mil arribos en el 2012, aportando con el 10,0% en el total de llegadas; mientras que el ingreso de divisas generadas por este mercado significaron un aporte de sólo un 2,2% sobre el total de ingreso de divisas. El promedio de permanencia en nuestro país es de 3,9 noches, tiempo durante el cual realizan un gasto total individual de US$ 127,9 casi cinco veces menor al promedio total”.Esa es la justificación oficial para minimizar la importancia de este turismo.

Pero resulta que es turismo concentrado en Arica
Resulta que las visitas de turistas bolivianos a Chile están muy enfocadas en la region de Arica y Parinacota que recibió un 73% de los turistas ingresados a Chile por la Frontera de Chungará


Del gráfico anterior podemos ver que la llegada de turistas muestra un notorio aplanamiento a partir del año 2008, que coincide con el desproporcionado sobre uso de la Ruta 11-CH para el transporte de carga con el consiguiente aumento de los accidentes con resultado de muerte en esa carretera. Este aumento del uso para carga se puede ver en el gráfico siguiente

El flujo de visitas se estancó al comenzar los accidentes
En resumen, podemos decir que aunque el aporte de divisas del turismo recibido desde Bolivia pueda parecer menor en el agregado nacional, tiene un gran impacto en la región de Arica y Parinacota que es la principal receptora de este turismo, y que en mi opinión no ha sido debidamente valorizado.

Planes que no se cumplen
En el Plan de Desarrollo Turístico de Arica y Parinacota 2011 se expresa la voluntad de “aumentar en un 45% el número de turistas internacionales que visitan en Chile cada año, pasando de los actuales 2.750.000 a 4.000.000 el año 2014”, esta meta es seriamente cuestionada en la región en vista de la llegada notablemente plana de turistas bolivianos, considerando que son uno de los aportes principales al turismo regional, tanto en cantidad como en impacto económico local.

Así podemos ver como el uso desproporcionado de la carretera 11-CH para transporte de carga está afectando una importante fuente de ingresos para la ciudad de Arica, como asimismo comprometiendo metas regionales de desarrollo en cuanto al incremento del turismo.

Turismo y relaciones diplomáticas
No es arriesgado decir que los turistas que nos visitan pueden nuestros mejores embajadores cuando vuelven a su país de origen y pueden hacer mucho más por la distensión de las relaciones que muchos zánganos con olor a linóleo, que ostentan altos cargos en nuestra diplomacia sin tener mucha idea de como llegaron allí. Si nuestras relaciones con Perú -el enemigo hereditario- hoy son tan buenas, esto se debe en buena medida al alto intercambio de visitas entre ambos países, seguramente eso ha hecho mucho más que los chambones de la diplomacia. Creo que es algo para tener en cuenta. Otro más de los perjuicios que nuestra región debe pagar por el sobre uso de la carretera 11-CH

27 julio 2015

Cuatro mentiras y una autorítica


Las cuatro mentiras
Nada ha dañado tanto la imagen de la presidenta como la falta de credibilidad. Aunque siempre ha existido la vaga sensación que los presidentes mienten -igual que todos los políticos- y eso era más o menos aceptable, en algún momento esta sensación vaga y general se convirtió en un convencimiento, en algo cierto, inaceptable e indignante.

El caso de la presidenta es especial porque llegó al poder con una alta credibilidad, o tal vez con una alta aceptación que incluía sus posibles defectos. Esta aceptación es lo que desapareció de la noche a la mañana. ¿Por qué? La causa principal del rechazo no es, yo creo, el hecho de mentir sino de hacerlo en la cara, con descaro, lo que ha convertido a las mentiras en un insulto. Solo miren esto:

Uno: las mentiras partieron por una cosa pequeña -casi anecdótica- cuando encontraron que durante la campaña, el actual canciller Heraldo Muñoz, junto con dos poderosos chilenos residentes en USA, habían organizado una fiesta en un yate de lujo en Nueva York para reunir fondos de campaña. La cosa suponía ilegalidades menores y la reacción partió por una negación total, seguida de una cadena de descubrimiento de mentiras y versiones contrapuestas. Este es un patrón que se ha repetido varias veces desde entonces.

Dos: el negocio inmobiliario del hijo de la presidenta, que no hubiese sido nada especial de no ser por el discurso exesivamente moralista de ella misma y los suyos contra la especulación. Cuando explotó el asunto la presidenta estaba de vacaciones y prácticamente desapareció durante semanas. Cuando finalmente se vio obligada a aparecer afirmó que no sabía nada de nada, "me enteré por la prensa" fue su frase que hizo historia y seguramente la acompañará por el resto de su vida.

Tres: resulta que a alguien se le ocurrió -tal vez para arreglar las cosas- perseguir al la UDI, principal partido opositor por el financiamiento ilegal de sus campañas con aportes de la empresa Penta. Al poco tiempo se descubrió que la campaña de la propia presidenta había sido financiada ilegalmente usando los mismos procedimientos por los que pusieron el grito en el cielo, pero en montos mucho mayores y con empresas mucho más importantes. Nuevamente el mismo patrón: negación total, contradicciones, descubrimiento de mentiras, cambio de versión y finalmente silencio.

Cuatro: finalmente está tomando fuerza una acusación acerca de que la presidenta no sería realmente médico y que el título que autoridades de la Universidad de Chile afirman haberle otorgado no existe o fue emitido de manera viciada. En su historia oficial no coinciden las fechas y nadie ha visto el famoso diploma de título, ya se confirmó que no tiene la especialidad de pediatría, algo que ella se había atribuido personalmente. Hoy el ministerio público está investigando una denuncia contra la presidenta por presunto ejercicio ilegal de la profesión.

Lo peor es que esa denuncia sería sencillísima de desestimar, bastaría que la presidenta presente su título y se confirmen con las fechas y los registros de ramos cursados en la Universidad de Chile. Pero eso tan simple no ha ocurrido, lo que da buenas razones para suponer que todo el asunto fue una falsificación, al menos mientras no se aclaren los muchos puntos oscuros que rodean al asunto.

El país del tabú
Vivimos entonces en una situación única -que yo recuerde- donde hay preguntas tabú que nadie puede hacerle publicamente a la presidenta, no porque se vaya a incomodar sino porque casi todos estamos convencidos que son mentiras y sería un desastre institucional que se descubrieran. Son esas cosas de las que es mejor no hablar.

La autocrítica
En la ideología marxista, existe el principio que es indispensable un proceso de autocrítica permanente para avanzar en las acciones políticas. Todos los partidos de inspiración marxista, desde socialistas hasta la extrema izquierda practican en mayor o menor medida la autocrítica como parte de su práctica normal para los análisis y la acción política.

Dos formas
Lo interesante es que esta autocrítica puede tomar dos formas. La primera es lo que podríamos llamar "autocrítica sincera" consistente en diagnosticar los errores que han llevado al fracaso y corregir sus causas. La segunda forma es la "racionalización" que consiste en justificar los errores diciendo que el único camino factible dadas las circunstancias, por lo que no serían realmente errores sino la reacción realista a las condiciones objetivas, otra racionalización común es echarle la culpa a algún tercero malvado.

Ni que decir que la autocrítica sincera es muy rara y se aplica solo en tanto no perjudique las posibilidades de conservar o adquirir más poder. Durante Allende se hacían extensas autocríticas contra los compañeros que "atornillaban al revés" portandose de manera prepotente o deshonesta, esa era una autocrítica que les permitía ganar popularidad pero no tenía mayores efectos prácticos. Desde luego nadie hizo nunca una autocrítica sincera acerca de las muchas equivocaciones políticas y económicas, esas fueron todas racionalizadas.

La doctrina no se toca
Otro caso en que la autocrítica sincera resulta uinaceptable es cuando golpea a la doctrina, a lo que se considera bases ideológicas o algún diagnóstico basado en eso. Es decir se puede criticar todo menos la doctrina. Mucha gente abandonó el marxismo porque en una autocrítica sincera encontraron que los problemas no eran de origen táctico, sino que estaban dentro de la propia idea marxista. Esto hacía la autocrítica extremadamente peligrosa,Trotsky por ejemplo, la pagó con su vida.

La autocrítica de Mayol, Atria, et al 
Volviendo a lo que pasa en Chile, después de la crisis que se ha producido por el convencimiento -y la indignación- de mucha gente que piensan que la presidenta y los suyos han mentido descaradamente, hemos visto como algunos están haciendo su propio proceso de autocrítica para analizar que salió mal y determinar como podría resolverse el entuerto.

Y como era de esperar, esta autocrítica es del segundo tipo: una cadena de racionalizaciones y justificaciones que no tocan el problema real: que efectivamente la presidenta ha mentido mucho, mal y no ha sido capaz de enfrentarse con su cadena de mentiras.

Los poderosos de siempre, para variar
Las racionalizaciones son varias, pero la más fuerte tiene que ver con la idea de "los poderosos de siempre". La idea es más o menos así: resulta que Chile siempre ha sido gobernado por el poder económico, que es el mismo desde la Colonia hasta hoy. La presidenta trató de quitarles poder con audaces reformas, pero no lo hizo con la suficiente fuerza y fracasó.

Es una explicación infantil, llena de errores históricos que sería muy fácil descartar, pero es lo mejor que tienen. Como no pueden hacer una autocrítica honesta, que los alejaría del poder y atacaría la base de sus doctrinas, usan la falsa explicación de los poderosos de siempre, las siete familias y todo ese yaba-daba que es exactamente análogo al cuento que armaron para explicar el fracaso de Allende y la Unidad Popular.

Creo que no hay un ejemplo más claro que ese sobre el uso de las racionalizaciones y explicaciones convenientes disfrazadas de autocrítica..


26 julio 2015

La Glorieta de Tacna



El sábado estuvo de cumpleaños mi querida suegra y con el alto auspicio de la Pilar nos fuimos a celebrar a Tacna a esta señora que ya pasó los ochenta y tantos hace rato. Me dio lata gastar mucho tiempo editando el video así es que lo coloco casi crudo.

La frontera estaba llena pero el trámite está muy rápido gracias a los nuevos carnets y los computadores. Recuerdo que en los viejos tiempos uno podía demorarse fácil 2 o más horas haciendo fila, hoy las filas son igual de largas pero avanzan muy rápido tanto en Chile como en Perú, los trámites se han simplificado un poco y la atención en ventanilla es mucho más ágil.

Como yo soy el experto en Tacna me preguntaron adonde íbamos así es que dictaminé ir a La Glorieta de Tacna, un lugar tradicional aunque no muy barato, pero ya que estábamos de fiesta y yo no tenía para pagar pensé "que no se note pobreza". El lugar es enorme y estaba repleto, por suerte encontramos una de las últimas mesas desocupadas -fácil deben haber una 500 mesas- al lado de la orquesta y me dispuse a comer uno de mis platos favoritos.

En la cocina un gran cartel decía "Atención: del 27 de julio al 02 de agosto nadie descansa, Atte. la gerencia". Me imagino si alguien pusiera un aviso así en Chile las demandas que le llegarían, por eso Chile es cada día menos competitivo. Resulta que es la semana de fiestas patrias y Tacna curiosamente se llena de chilenos, mientras que los tacneños se vienen en gran cantidad a Arica. Es de esas cosas raras que pasan en la frontera. Para las fiestas patrias chilenas los ariqueños nos vamos en masa a Tacna y los tacneños vienen a Arica, que cosa más rara.

La cosa es que yo y el Tomás Jr. pedimos picante a la tacneña, dicen que el de La Glorieta es de los mejores de Tacna, es un plato de origen africano compuesto de grandes trozos de guatitas, patas de chancho, papas, ají rojo -a pesar de su nombre el plato no es picante, solo tiene el color- llajta que es una especie de alga, charqui y otras cosas más que ni tengo idea. Anda por ahí con el picante ariqueño que prepara mi querida suegra, excelente.

Las mujeres pidieron corderito a las brasas, unas chuletas de cordero muy sabrosas. En la región de Candarave, del altiplano Tacneño, crian unos corderos exquisitos, debe ser de los mejores del Perú. Un par de cervezas cuzqueñas negra y rubia completaron el almuerzo que salió unos 33 dólares en total. Caro para ser Tacna pero hay otros mucho más caros, al comimos y bebimos 4 por unos de 8 dólares cada uno y quedamos bien satisfechos.

Los restaurantes campestres son una de las cosas más características de Tacna, en la campiña de Pocollay y camino a Pachia están el Hueco, Patroncito, La Huerta, y muchos más del mismo formato. Desde luego el Tacna Mía, del papá de mi amigo Héctor, de donde tengo recuerdos inolvidables. La Glorieta es tal vez el más antiguo y está dentro de la ciudad, lo recomiendo a ojos cerrados. Los fines de semana es con fiesta como para quedarse todo el día, sirven un vino de chacra, hecho en la misma casa, muy rico.

Después de la comilona, algunas vueltas y a esperar que las mujeres fueran a comprar, nos aburrimos de lo lindo con el Tomás Jr estacionados detrás de Solari mientras hacían sus interminables compras. A la vuelta otra multitud de gente pero también fue rápido, no demoramos más de 15 minutos en cada aduano.

Un buen día en la familia de los locos Adams, una familia muy normal.

24 julio 2015

Que elegimos cuando votamos

La influencia del Tío Sam
Poca gente se da cuenta de la enorme influencia de Estados Unidos sobre el mundo moderno. Claro no el país de Obama o de Donald Trump, sino al de Jefferson, Franklin, Washington, Paine y todos esos. La democracia liberal representativa en que vivimos es una copia -mala copia dirían algunos- del invento creado en la Revolución Americana en 1776.

No solo en nuestro país, sino que es el sistema de consenso en casi todo el mundo civilizado, desde el colapso de la Unión Soviética. Fue inspirado en la Carta Magna más la elección popular de las autoridades y la independencia de los poderes Ejecutivo, Legislativo y Judicial. La democracia liberal es uno de los consensos más universalmente aceptados en la actualidad. Aunque no todos tienen muy claro como funciona. Para propósitos didácticos podríamos comparar con una sociedad anónima, miren:

Democracia y sociedad anónima
Partamos por los dueños: "soberano" significa que alguien puede hacer cualquier cosa que se le antoje, sin estar sujeto a ninguna norma, ley, o principio moral ajeno. El soberano solo tiene los límites que el mismo se impone (o los que le impone alguien más poderoso que él, en cuyo caso pierde la soberanía). La soberanía tiene bastante que ver con la propiedad, porque justamente podemos hacer lo que nos de la gana con lo que es propio. La relación de los ciudadanos con la nación en una democracia liberal, es análoga a la de los accionistas con una sociedad anónima.

La idea de que "el pueblo", es decir los ciudadanos son los dueños del estado viene de la Carta Magna de Inglaterra, aunque tomó un largo camino en transformarse en lo que es hoy. Porque es materialmente imposible que todos ejerzan la soberanía, de la misma manera que sería imposible que todos los accionistas decidan cada detalle del rumbo de una empresa. Entonces se eligen representantes.

Muchas manos matan la guagua
Solo un pequeño grupo puede administrar y otro aún más pequeño puede tomar las decisiones estratégicas. En una sociedad anónima los que toman las decisiones estratégicas son los miembros del directorio, mientras que los que administran son los gerentes y ejecutivos, contratados por los directores.

A veces no es bueno ser minoritario
¿Como se llega a ser director? Se hace cada cierto tiempo una junta general de accionistas donde eligen -por ejemplo- 7 directores. Estos directores a su vez contratan a los gerentes y son los que actúan como los verdaderos dueños. Hay un viejo dicho "no existe peor negocio que ser accionista minoritario de una empresa grande", porque esos solo pueden mirar lo que hacen los directores, que a veces abusan de su poder en beneficio propio. Un minoritario solo puede rezar para que los directores y ejecutivos lo hagan bien y de ese modo sus acciones suban de valor.

Un hombre, un voto
En un estado democrático es bien parecido, pero hay dos diferencias importantes. La primera es que no hay votantes con más o menos acciones: todos tienen voto de igual peso, un hombre es un voto. A diferencia de las sociedades anónimas donde algunos tienen más y otros menos parte en la propiedad, en las democracias liberales la "propiedad" es decir la soberanía del estado está repartida en porciones exactamente iguales.

¿Quien vigila a los vigilantes?
Otra diferencia fundamental es que las sociedades anónimas están estrictamente vigiladas por un ente más poderoso que es el estado, mientras que a quienes dirigen y administran el estado no los vigila nadie. Nadie puede vigilar a los vigilantes. Esta segunda diferencia es la que permite los abusos de los políticos y los procesos tan comunes de demócratas que se transforman en déspotas simplemente modificando las leyes y aprovechando el poder para adquirir facultades extraordinarias y finalmente más poder.

Un gobierno democrático que abusa es mucho peor que una sociedad anónima abusiva, porque el mandatario, mientras está en el poder es depositario de la soberanía y en la práctica puede hacer más o menos lo que se le antoje. Tal como los antiguos príncipes solo está sujeto a la fuerza que mantenga por mano propia o por las alianzas que logre articular. Los padres fundadores cuando inventaron el sistema vieron claro este peligro y lo trataron de conjurar con el equilibrio de poderes, pero eso nunca ha funcionado totalmente.

Las monarquías hereditarias
Históricamente las monarquías hereditarias han sido el sistema de gobierno más estable y exitoso, al menos en términos de permanencia. La democracia liberal que hoy se cree el único sistema civilizado posible, es solo un paréntesis con muy poca historia y resultados bien dudosos. En la antiguedad el Príncipe era quien tenía la soberanía y reinaba en base a la fuerza propia o de las alianzas que lograba hacer con la nobleza, o con otros príncipes.

El de a pie no corta ni pega
Hoy el poder se designa según el resultado de elecciones donde cada ciudadano vale un voto. En teoría un ciudadano hoy tendría más poder efectivo que el vasallo en la Edad Media, pero eso solo es una apariencia, porque el poder genera sus propios mecanismos para perpetuarse. No es casual que en todas las democracias del mundo se van repitiendo los mismos apellidos a lo largo de los años, así el poder se hereda, igual que en los viejos tiempos.

¿Hay un ciclo de vida?
Yo creo que la democracia liberal tiene su ciclo de vida, y ahora estamos en una etapa en que la gente perdió el antiguo embrujo o ilusión que tenían de estar participando efectivamente en la soberanía. Por eso cada vez menos gente se interesa en ir a votar, porque el propio poder ha ido creando oligarquías hereditarias ¿para que votar?

Un artículo interesante
Bueno, todas estas ideas locas y otras que no coloco por no latear, se me ocurrieron leyendo un entretenido artículo del profesor Joaquin Meade, llamado Diez Herramientas para la Defensa Ética del Individuo, donde entre muchas otras cosas, se refiere a esa imposibilidad que tenmos los de a pie para llegar siquiera a pellizcar un poquito del poder.

El argumento de la banda de ladrones
También habla del Argumento de la Banda de Ladrones de Platon, que dice que es imposible que todos actúen de manera oportunista todo el tiempo sin que terminen disolviéndose,

"la pérdida de aptitud, capacidad o dinamis del grupo para llevar adelante acciones comunes fundadas en la reciprocidad y la justicia. La injusticia genera stasis, que equivale a un desorden social generalizado donde predomina el odio, el egoísmo, la crueldad y el despojo,(...) Se pierde así el poder para obrar en común y se marcha a la disolución".

Es un argumento interesante pero no creo que sirva mucho como norma, creo que es parte de la dinámica de las organizaciones, cuando en algún momento convienen más los comportamientos oportunistas y por eso se terminan disolviendo, probablemente es algo inevitable y parte de su ciclo de vida. A todo esto, tal vez esa es la etapa en que están entrando los sistemas de democracia liberal ahora mismo.

23 julio 2015

Los vivos y los tontos, mi comentario


El dilema planteado por Mariano Grondona, entre comportamientos oportunistas y aquellos que -al menos en teoría- obtienen óptimos sociales no es nuevo. Ni siquiera su ejemplo de los que viajan gratis es novedoso, el mismo dice que se trata de algo muy conocido en la academia. En inglés la expresión "free rider" significa justamente "oportunista", alguien que saca ventajas a costa del mal de otros.

El cambio simultaneo
Más que en la novedad, el valor del artículo está en la excelente explicación del dilema y sobre todo en la propuesta de solución que Gondona ofrece: una especie de cambio de actitud simultáneo y coordinado, cosa que a mi me parece muy poco realista.

Revisé la Tragedia de los Comunes
La lectura de Grondona me motivó a leer -esta vez con mucho más cuidado- La Tragedia de los Comunes, el famoso artículo de Garret Harding, muy bien redactado pero que también termina con una solución que me parece no factible, peligrosa y medio fascista: Harding lo llama "coerción mutuamente acordada" que no es otra cosa que aumentar las prohibiciones basado en la idea que existe un "bien común" superior al bien individual.

Una condición sine qua non
Me llamó mucho la atención que aunque Harding nota que a medida que crece la población, los bienes comunes se hacen cada vez más difíciles de mantener, no aboga por lo que es obvio: permitir la apropiación privada de todos o la mayor parte posible de ellos. Pero leyendo con cuidado me di cuenta de donde está su punto flaco: resulta que el supone al estado de bienestar como una condición intransable. En el fondo todo su alegato por lograr óptimos sociales y su apoyo a restringir la libertad de las familias sobre la natalidad son racionalizaciones para defender su amado estado de bienestar.

Entonces no hay solución, de ningún tipo
Si ponemos al estado de bienestar como una condición inamovible, el dilema del "free rider" no tendrá solución técnica, como dice Harding, pero tampoco tendrá solución de ninguna clase. La única solución -en largo plazo- será el derrumbe del estado de bienestar, que está en la causa de la tragedia de los comunes y de los comportamientos oportunistas generalizados. Solo hay que mirar lo que pasa en Europa y lo que está pasando en Estados Unidos.

El Transantiago
Y basta con mirar mucho más cerca, acá mismo en Chile. Alejandro Pavez en un comentario a la entrada anterior me aclaró la cosa cuando dijo que en el Transantiago se estaba dando justamente la dinámica que describe Grondona, donde cada vez más gente intenta viajar gratis y el sistema se deteriora, es el mejor ejemplo práctico de lo que describe Grondona en su columna.

Incentivos
En economía se entendió hace rato que las personas responden a incentivos, tal vez en la London School of Economics no lo tengan tan claro, pero en los lugares más serios esa es una de las cuestiones aceptadas y consideradas casi obvias.  La gente se comporta de manera oportunista cuando tiene incentivos para hacerlo, o sea, cuando el análisis costo/beneficio les sale positivo.

La impunidad es excelente incentivo
Grondona dice que habría que apelar a la moral y los sentimientos de culpa para convencerse a cambiar de actitud. Harding dice que habría que castigar y prohibir. Creo que los dos están equivocados. Harding hace un buen caso contra los argumentos morales y de culpa, pero no se da cuenta que es inútil prohibir algo cuando el costo/beneficio es positivo, especialmente cuando existe cierta expectativa de impunidad.

Cuando los impuestos -un ejemplo que Harding menciona- suben hasta hacerse insoportables la gente comienza a evaluar el costo y el beneficio de simplemente dejar de pagarlos y llegado a un punto simplemente no pagan más. El alcance de los castigos y prohibiciones que puede imponer efectivamente el estado es muy limitado. En Chile, para una población cercana a los 18 millones hay capacidad para encarcelar no más de unos 150 mil presos, o sea un 0.8% de la población.

¿Que pasa si todos se ponen a asaltar bancos?
¿Que pasaría si el próximo año unas 500 mil personas decidieran dedicarse a asaltar bancos? El estado simplemente no podría contenerlos y los bancos desaparecerían o cambiarían a otro sistema. Este no es un ejercicio retórico, es lo que está pasando desde el año 1990, el estado y la policía están efectivamente sobrepasados porque la sensación de impunidad va creciendo.

Y es lo que pasó con el Transantiago. ¿Se acuerdan cuando todos los buses eran privados y nadie podía viajar sin pagar pasaje, a menos que convenciera al chofer? Eso muestra los incentivos de la propiedad privada en acción. Si la gente se niega a pagar pasajes a un dueño privado de bus, este vende el bus y se dedica a otra cosa. Todos pagan porque saben que no le permitirán viajar gratis. Incentivos.

El hombre olvida antes el asesinato de sus padres...
Tal vez no exista un sentimiento más fuerte que el de la propiedad privada. Maquiavelo, que sabía de estas cosas, escribió "Porque el hombre olvida el asesinato de sus padres, antes que el despojo de sus bienes".

La mamá del cordero
La Tragedia de los Comunes como el dilema de los que viajan sin pagar el pasaje, son subproductos de la condición de estado de bienestar, un sistema de organización social inviable, imposible de sostener a largo plazo porque requiere encontrar óptimos sociales. Los "bienes sociales" son imposibles de optimizar, lo dice Harding en su artículo, es matemáticamente imposible optimizar dos o más variables. Hasta Wilfredo Pareto, inventor de la optimización social más aceptada en la historia se desencantó de su propia idea.

Esa es la madre del cordero, la mano invisible sigue viva y coleando, aunque le repugne a Harding y otros tontos, el interés propio, egoísta, es la verdadera fuerza de la civilización y de todo lo que hace la gente. Cualquier cosa que se haga para torcer esta, que es una de las pocas leyes constantes del comportamiento humano, está destinada a fracasar.

Los vivos y los tontos, parte 2


A continuación, transcribo la segunda parte del extraordinario artículo de Mariano Grondona, por favor léanlo con cuidado porque vale la pena, es de lo mejor que he leído:

Si se exige demasiado, la gente aprueba labios para afuera. Lo que se difunde a partir de ahí no es la disciplina social sino el cinismo: el divorcio entre la palabra y la acción- La sociedad queda dividida entonces en una minoría de "tontos", que acatan la exigencia solidaria y cumplen sus obligaciones legales, y una mayoría de "vivos" que se ajustan al comportamiento del pasajero gratis.

"El vivo vive del tonto y el tonto de su trabajo", dice el refrán. En una sociedad cuyo índice de cooperación social es bajo hay muchos vivos y pocos tontos. Como consecuencia, todos son tontos. Los llamados tontos, por dejar que los vivos vivan de su trabajo. Los que se creen vivos, porque el bajo índice de cooperación social pone en quiebra a la sociedad de la que forman parte.

Una corriente de interpretetación diferente de nuestra romántica exaltación de la solidaridad ha señalado una y otra vez que, para cooperar, no hace falta ser solidario: basta con ser egoísta... inteligente. "En el fondo -escribió David Hume- el villano es un tonto". En el mundo anglosajón, hay otro refrán que dice "la honestidad es el mejor negocio". Cuando el egoísta es inteligente, advierte a tiempo la trampa del pasajero gratis. El ideal egoísta de no pagar mientras el resto paga es una utopía porque los demás, al fin, se "avivan" y tampoco pagan. Cuando todos se "avivan", todos son tontos.

¿Cuantas veces se han asombrado los viajeros latinoamericanos ante el escrupuloso cumplimiento de las leyes y ordenanzas en países como Suiza y Alemania? En estas latitudes, un ciudadano es capaz de detenerse frente a una luz roja a las tres de la mañana cuando nadie mira. Es que la experiencia y la educación lo han llevado a reconocerque vale la pena ser "tonto" a escala individual si esta es la condición para que el país sea "vivo" a escala nacional; que es mejor cumplir la ley en una sociedad donde todos la cumplen que evadirla en una sociedad donde casi todos la evaden.

¿Como pasar empero, de una sociedad a otra? ¿Si un individuo o un equeño grupo deciden cumplir con rigor la ley mientras la mayoría sigue sin hacerlo, serán doblemente tontos como miembros de una sociedad tonta donde, además son explotados por la mayoría según el consabido refrán: "El vivo vive del tonto..."

Los diversos sectores que integran una sociedad de bajo índice de cooperaciónsocial debieran pasar del incumplimiento al cumplimiento de las normas simultáneamente, como parte de un pacto, porque la sospecha de que otro no lo hará es el mejor argumento para que yo tampoco lo haga. Promover este paso colectivo en un clima de confianza recíproca es el desafío que enfrentan los líderes latinoamericanos.

21 julio 2015

La Isla Grande



Nota: ya se que debí colocar el obturador a 1/50 o 1/100 para que no parpadeara el maldito video, todavía se me olvidan las cosas más simples, maldición.

Estuvieron en Arica mis ex compañeros del glorioso Liceo de Hombres de Ancud -que en realidad era mixto- Luis Guillermo (Mito) Pérez y Gloria. Con Guillermo fuimos compañeros de curso durante la enseñanza media, Gloria iba en el curso del lado. Que montón de recuerdos.

Desde mi nacimiento hasta el año 1979 solamente tengo dos fotos: una que me sacaron cuando guagua con menos de un año y otra en Codpa, el año 1969. Guillermo me dijo que había otra foto mía del paseo de fin de curso que hicimos en 1973, que es la foto que sale abajo, pero yo no salí, seguramente estaba durmiendo la resaca porque de ese paseo solo recuerdo que hicimos un curanto y tomé los dos días completos.

Copio textual la leyenda de foto que aparece en Facebook:

Paseo despedida 4º Medio año 1973, en Quemchi, ex-fundo el toro.: de izq. a derecha Rosa Villarroel , Sergio Yañez, Norma Maldonado, Caupolicán Barría (en su casa), Margarita Martínez, Mariluz Gallardo, Pedro Sánchez, Luz Villarroel , Antonio Mansilla (músico invitado), Cecilia Pérez Cuitiño, Olivia y Danitza Norambuena. Hincados: Jorge Roth, Fernando Vidal, Guillermo Pérez y Mirta Segovia Ross.

Casi todos mis compañeros, que recuerdos: Danitza y la Mariluz, Jorge Roth. ¡Cecilia recién me ubicó en el Facebook!. Ah la nostalgia. El Mito me recuerda que teníamos varias cosas en común: el mismo cuaderno verde que servía para todo, en el bolsillo trasero. El era y sigue siendo músico -tocaba con los Sonix en las fiestas del Cuerpo de Bomberos- yo envidiaba a los que tocaban algún instrumento. Me acordé por supuesto de Bruno Shulbach y su orquesta, todavía está vivito y coleando claro que pasados los setentas. Esta foto es del ex Gimnasio de Ancud.

La leyenda dice: Ancud tuvo festival del Alas Chiliotas, esta era su Orquesta festival en el desaparecido Gimnasio Municipal (hoy se ubica el terminal de Buses Cruz del Sur).

Es difícil describir lo que significaba el basketbol en esos años, todo Ancud repletaba el gimnasio de tejuelas de alerce, el Liceo y el Seminario Conciliar con sus respectivas bandas, los enemigos hereditarios.

Las fotos antiguas que tiene el Mito en su Facebook son un festín para la nostalgia, miren esta del Liceo de Ancud, cuando estaban celebrando a unos deportistas que se subieron a la cornisa del Cuerpo de Bomberos, ubicado al lado del liceo

En los setentas, en esa plaza pasábamos horas sentados cuando no llovía y cuando se largaba a llover nos parábamos en una especie de corredor cubierto que había en la calle Pudeto, mirando la lluvia, para variar. En la noche los días de semana íbamos al bar "La Golosina", me dicen que doña Gina murió no hace muchos años, debe haber tenido unos quinientos años. Una vez tuve la mala idea de decirle una broma a su hijo y casi me deja KO de la bofetada que me mandó, saludos para él, ¡todavía me duele!

Me contaban que había sido de los amigos de entonces, la mayoría profesores: el Vencho Faulbaum con quien compartimos la pieza de pensión en la casa de los Norambuena Jipolou por 4 años, mi otro compañero Juan Aguilar "Mechuque" es hoy director de una escuela en Puerto Montt. Evangelista Diaz "Banchelo" otro músico que me enseñó los tres acordes que todavía aporreo en el teclado, trabajó de piloto marino y hoy transporta personas por tierra. Jorge Roth profesor. La Danitza en la Municipalidad ¿que habrá sido de la Mariluz?. El cachorro Ruiz-Clavijo dedicado al turismo. Que cantidad de amigos tuve allá, esos me salvaron en una época de grandes problemas.

Miren esta foto de Los Sonix en una de esas fiestas de fin de semana

El Mito tocaba trompeta, se recuerda que yo nunca aprendí a bailar, me sentaba con un trago al lado de la orquesta para ver como tocaban. Solo con los lentos a veces me animaba:



Y el corazón me hacía bom-bom, bom-bom y me ponía rojo como un tomate. Tiempos aquellos. Otra cosa que se me había olvidado, me la recordó mi amigo, es que pasaba todas las clases dibujando, esa fue una costumbre que me persiguió en Inacap, en la Universidad y hasta cuando estudié el MBA hace pocos años: como me costaba concentrarme, me aburría y me ponía a dibujar.

Mucho de lo que soy ahora, mis costumbres, ideas, preferencias son de esos años, tengo un sustrato chilote que se me asoma a cada rato. Fue un encuentro mágico conversar de esos tiempos y saber de los amigos de entonces, contactarme con Cecilia y acordarme de todo. Nunca sufrí tanto y nunca fui tan felíz como en esos años. Todavía recuerdo como se me apretó la garganta cuando pasé el Canal de Chacao sabiendo que ya no iba a volver a Chiloé. En fin, tal vez es cierto eso que todo tiempo pasado fue mejor.

20 julio 2015

El error de la Reforma Tributaria

Leí el otro día que lo que distingue a un optimista de un pesimista es que el optimista siempre llega tarde a las citas, porque parte de la base que va a tener suerte, encontrará estacionamiento cerca, todo saldrá perfecto y no necesita salir temprano. El pesimista en cambio piensa en todo lo malo que puede pasar y sale mucho antes. Mientras más adelantado llega, más pesimista es la persona.

El optimismo puede ser muy bueno para emprender y correr riesgos, pero resulta mortal cuando se usa al momento de planificar. Estaba pensando que salió mal con la reforma tributaria y parece más o menos claro que el error fue una especie de optimismo tonto y contra todas las señales.

El gráfico que encabeza esta entrada muestra la evolución del PIB nominal en Chile entre 1999 y 2013, momento en que se comenzó a implementar la reforma tributaria y se puede ver dos bruscos crecimientos en los años 2004 y 2010 que coinciden con el altísimo precio del cobre en esos años.

El error de diseño
En la página del gobierno de Chile, para hacer propaganda a la reforma tributaria el 2014 publicaron dos gráficos. El primero era el que planteaba subir la recaudación desde el 0.29% del PIB actual hasta un 3.02% en 2018, a fines del gobierno de Bachelet, el gráfico es este
Bastaba con dividir 3.02 entre 0.29 para darse cuenta que lo que se proponía era subir diez veces el porcentaje de recaudación en 5 años, todo muy bien en el papel pero solo alguien extremadamente tonto podría pensar que se puede multiplicar por diez la tasa de recaudación sin afectar el crecimiento del PIB. El supuesto básico -y error grosero- que se cometió en el diseño fue creer que el PIB coninuaría creciendo igual, pese a todas las señales que avisaban que venía una contracción.

Y, como era de esperar, no solo vino una contracción por los menores precios del cobre -totalmente previsible- sino que el solo anuncio de subir diez veces el porcentaje del PIB en recaudación, creó la tormenta perfecta, porque sumó al efecto de la baja de precios otro mucho peor: el de la baja de expectativas. Esto podría haberlo previsto cualquiera con dos dedos de frente. Yo que no tengo grandes conocimientos de nada lo anuncié, apenas Jorrat apareció en una entrevista anunciando la idea de eliminar el FUT y subir los impuestos.

Pero la estupidez fue todavía más allá. En el otro gráfico con que el gobierno presentaba el proyecto estaba el segundo gran error de diseño ¿como planeaban en la práctica lograr ese enorme aumento de recaudación? Simple, subiendo el impuesto a las utilidades de las empresas, desde un 20% a un 27% miren:

El que diseñó esto -Jorrat- y quien lo implementó -Arenas- no solo pecaron de optimistas, sino de estúpidos, desconociendo una realidad fundamental, que es el principio cero de la recaudación tributaria: la recaudación de impuestos sobre las utilidades crece solo cuando crecen las utilidades, no cuando crece la tasa. Lo que pasó solo en un año fue que se destruyeron miles de empleos, lo que en un par de años se reflejará en una baja brutal del PIB.

Esto no es ciencia espacial. El año 2012, cuando apareció la entrevista a Jorrat escribí una entrada que se llamaba Ojalá Fuese tan Sencillo, donde decía algo obvio: resulta que el 50% de 100 es menos que el 10% de 1000. Que es muy tonto subir la tasa creyendo que los ingresos seguirán iguales. A menos de un año de cometida esta estupidez llamada "reforma" se han visto los efectos ¿que pasará si siguen subiendo la tasa del impuesto a las utilidades de las empresas? Dos cosas: que el fisco recaudará cada vez menos y que cada año se destruirán más puestos de trabajo. 

A menos, claro, que alguien se ponga los pantalones y de la pelea por desmantelar este evidente desastre. El problema es ¿quien se atreve? Ni un solo político de la actual oposición se atrevería, porque los que no tienen de ineptos lo tienen de cobardía.

La reforma tributaria fue un desastre por muchos motivos que cualquiera podía haberse dado cuenta de antemano. La alta recaudación de los últimos años fue producto de un volumen cada vez mayor de aportes de las empresas privadas de la gran minería. Al subir la tasa del impuesto a las empresas simplemente mataron a la gallina de los huevos de oro, por codiciosos e ignorantes.

No toda la culpa es de Jorrat, que fue Jefe de Estudios del Servicio de Impuestos Internos, ni de Arenas, que fue Director de Presupuestos (el más técnico de los cargos económicos del gobierno). También hay culpa de la presidenta por la ineptitud, ignorancia y falta de tino en llevarlos al gobierno y darles poder de decisión. Otra parte de la culpa -tal vez la mayor- fue de los que colocaron a la presidenta y su gente en el gobierno.

Pero los peores -a mi modo de ver- fueron los políticos de oposición, que con una actitud tibia y cobarde no fueron capaces de hacer loq ue se suponía que hicieran: oponerse con dientes y muelas, votando en masa contra el proyecto y reclamando hasta el último minuto. Hoy se estarían festinando pero ya perdieron su oportunidad, porque la reforma también se aprobó con sus votos.

Dicen que todo en exceso hace mal. Alguien que es excesivamente optimista resulta muy difícil de diferenciar de un idiota y alguien excesivamente cauto termina siendo indistinguible de un gallina. Para decirlo claramente: Jorrat, Arenas y su troupe fueron idiotas, mientras que la oposición en masa fueron gallinas. Y para variar paga Moya, nosotros, los giles.